Nació en París hacia 1620. Entró de pequeñita en el pensionado del Monasterio de la Virgen María de Soissons. A los siete años había aprendido los rudimentos de la Regla benedictina. Rechazando los juegos propios de su edad, se dedicaba mayormente a los ejercicios piadosos. Abrazó la vida religiosa a los 16 años en dicho monasterio. Llegando con tal motivo abundantes donativos de parientes y amigos, redobló su celo por la atención de pobres y enfermos. Asimismo, mostró siempre su cuidado en la celebración debida tanto de las misas solemnes como del rezo del Oficio Divino. Pero, a pesar de formar parte de uno de los monasterios más renombrados de Francia, quiso por mayor penitencia pasar a las Mínimas de Soissons, donde tomó el nombre en religión de Margarita de la Santa Cruz. Profesó la Regla de las Minimas el 16 de junio de 1675. Destacó en la humildad, en la mortificación (ayunos, cilicio) y en la oración. Observó siempre con rigor el voto de vida cuaresmal y sólo por haberlo prescrito el médico y con expreso mandato de la superiora, se avino no sin llanto al uso de alimentos pascuales. Recibidos los sacramentos y después de decir "Dios santo, Dios fuerte" expiró el 14 de febrero de 1690.
BIBLIOGRAFÍA: