Religioso mínimo perteneciente a la Provincia de Aquitania. Profesó en el convento de Sammarthan en el año de 1617. Dio pronto muestras de obediencia, dedicación a la oración, humildad, modestia y todo género de virtudes. Todo ello hacía prever un futuro sacerdote ejemplar en letras y en espíritu. Enviado a Béziers, enfermó grave y dolorosamente revelando en tal enfermedad una paciencia y una serenidad admirables. En sus últimos momentos, con el crucifijo en mano, entonó diversas oraciones y jaculatorias con el alma llena de divino amor. Falleció con olor de santidad en 1622.