Religioso mínimo natural de Oporto. Dejada la carrera de las armas, tomó el hábito de San Francisco de Paula en Andújar el 6 de marzo de 1512, siendo Provincial de Andalucía fray Giacomo Presenda. Fue el primer Provincial de la Provincia de Castilla cuando fue erigida en 1535. Versado en la filosofía y en la teología, destacó también en la predicación. Las crónicas destacan su ejemplaridad en la oración y sus combates con el demonio. Fue Mestro de novicios en Toledo. Fue uno de los confesores de Sor Gracia de Valencia. En 1570 falleció en el convento de Valencia, siendo enterrado en la capilla mayor.