Religioso mínimo malagueño perteneciente a la Provincia de Andalucía. Fue Lector de Teología expositiva y de Sagrada Escritura, Corrector del convento de Málaga, Regente de Estudios y Corrector de Antequera y Examinador Sinodal del Obispado de Málaga. También fue Cronista de la Orden. Fue el autor de: Desagravio congruo, sino condigna satisfación en la mayor ofensa que a la suma Bondad pudo la mayor ingratitud, obstinada prevenir y sacrílega executar, Málaga, 1636 (hoy se conocen poquísimos ejemplares de esta obra -uno se halla en la Biblioteca de la Hispanic Society de Nueva York-), en la que Prado recoge el certamen poético celebrado en Málaga en desagravio de los hechos de Corpus del mismo año en Flandes, en Tienen, y de Breve descripción de la ruina lamentable, de la tragedia lastimosa, que la nobilísima, muy antigua y leal ciudad de Málaga ha padecido por un sangriento diluvio que tuvo el 22 de setiembre de este año de 1661, Málaga, 1661. Tradujo, completándola con algunas adiciones, la vida de San Francisco de Isidoro Toscano bajo el título: Prodigiosa vida, y admirable muerte de S.Francisco de Paula, raro portento de la naturaleza, justa admiración de los siglos, escogido Plenipotenciario de Dios y gran Canciller de su Caridad soberana, único Fundador y Patriarca del esclarecido Orden de los Mínimos, Primero y sin segundo Institutor del penitente voto de la vida Quaresmal, Málaga, 1669. Tenía otras obras escritas, en particular una Crónica General de la Orden (comprendiendo descripción de Provincias, Conventos, Mártires, Confesores, sujetos eminentes en santidad y letras, Obispos, Escritores, Calificadores de la Inquisición, Predicadores reales, Superiores Generales, gracias, favores e indultos pontificios, etc.), pero no consta que vieran la luz, ni si los manuscritos se han conservado. Un soneto del Padre Prado se publicó en alabanza del autor en los Ocios de Castalia de Juan de Ovando.